Lecciones de un emprendedor y apasionado aprendiz de por vida

En entrevista con Forbes Ashwin Damera, CEO y cofundador de Emeritus, se expresa así: Crecí en la India, un país con islas de prosperidad en medio de océanos de pobreza. Pronto me di cuenta de que lo que determina si estás prosperando en una isla o hundiéndote en el océano es el acceso a la educación. Tuve la suerte de recibir una gran educación y obtener mi MBA de la Escuela de Negocios de Harvard, y eso me abrió muchas puertas. La educación, lo sé de primera mano, cambia vidas.

Esta es la razón por la que participé en la creación de Emeritus, que hoy es líder mundial en brindar educación accesible, asequible y de alta calidad. Colaboramos con las mejores universidades de todo el mundo para ofrecer cursos cortos, programas de grado, certificados profesionales y educación ejecutiva. Ayudamos a nuestros estudiantes a aprender nuevas habilidades y formas de pensar para transformar sus carreras y sus organizaciones.

Creo que las personas exitosas siempre están aprendiendo. Siempre estoy aprendiendo a ser un mejor líder y miembro del equipo y a equilibrar el trabajo y la vida. Aquí hay cinco lecciones clave que he aprendido a lo largo de mi viaje como cofundador y CEO.

Lección 1: Haz el trabajo que te importa.

Como emprendedor, no hay forma de que puedas predecir el resultado de la empresa que comienzas. Si estás haciendo algo que resuelve un problema del mundo real, tu trabajo será importante y significativo para ti, ya sea que tu empresa triunfe o no. De cualquier manera, te has dedicado a algo en lo que crees.

Al fundar Emeritus, quería hacer que la educación fuera más accesible para las personas de todo el mundo. Todos los días, escucho a un graduado que dice: “Este curso me ayudó a conseguir este nuevo trabajo”; “Este curso me ayudó a mejorar en mi puesto actual”. Cuando estás haciendo algo que te apasiona, es emocionante venir a trabajar.

Y, cuando realmente te importa lo que haces, cuando estás emocionado por tener un impacto, cuando te inspiran tus socios y tu equipo; Tu startup también tiene más probabilidades de tener éxito.

Lección 2: El fracaso es tan importante como el éxito.

Mi primera startup fue en el espacio de los viajes. Trabajé en ello durante algunos años y fue un resultado sólido y una gran experiencia de aprendizaje. Lo vendimos, a pesar de que no tuvo mucho éxito según muchas de las métricas que la gente usaba para juzgar el éxito. Pero esa experiencia me enseñó a ser emprendedor. Me permitió crecer como líder.

Como emprendedor, estás obligado a tener pequeños fracasos todos los días. Los fracasos le ocurren a todos. Lo que puede convertirte en un emprendedor exitoso es aprovechar estos contratiempos. Aprende de ellos y mejora tu producto o presentación. No tengas miedo de adaptarte y volver a intentarlo.

En mis dos startups, el primer gran inversionista institucional fue alguien que me había rechazado anteriormente. Por eso digo que para un emprendedor no existe un no. Un no es simplemente un sí retrasado.

 

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Lección 3: Encontrar el producto adecuado para el mercado lleva tiempo y marca la diferencia.

Fundamos la empresa en 2010 con una visión clara: nos asociaríamos con las principales universidades del mundo para ofrecer cursos presenciales para profesionales que trabajan en la India. Los cursos ofrecidos en la India serían mucho más asequibles que ir a estudiar a los EE.UU. o Europa. Además, entregaríamos un certificado o título de una universidad de renombre mundial.

Después de cinco años, teníamos menos de 1.000 estudiantes. Los números estaban aún lejos de lo que habíamos proyectado, ni siquiera eran suficientes para respaldar el trabajo que habíamos realizado. Fue entonces cuando supimos que tendríamos que globalizarnos. Y para ello, era fundamental cambiar nuestro modelo.

Migrar el proyecto a Internet nos permitió despegar. Sin embargo, nuestro éxito aún requería más refinamiento. Aprendimos que el consumidor en línea es diferente. Por lo general, quieren desarrollar una habilidad específica, a diferencia de los estudiantes presenciales que desean una educación de gestión. También aprendimos las diferencias de cada mercado.

Seguimos ajustándonos, perfeccionando y, en un mundo que evoluciona rápidamente, seguimos ofreciendo los nuevos cursos que nuestros estudiantes están buscando. Al adaptar el producto a otros mercados en evolución, descubrimos un crecimiento acelerado, tanto como nunca lo hubiéramos imaginado.

Lección 4: Los socios adecuados son clave y merecen respeto.

Emeritus tiene éxito porque podemos ofrecer una educación de clase mundial, respaldada por las universidades más prestigiosas. Somos capaces de trabajar con estas grandes universidades porque les demostramos que valoramos su asociación. Además, mantenemos sus estándares y les ayudamos a expandir sus mercados para llegar a los estudiantes de todo el mundo.

Nuestro primer socio fue la principal escuela de negocios de Francia, INSEAD, donde mi cofundador se graduó. Él había trabajado en los programas de educación ejecutiva de esa universidad. Confiaron en él y, finalmente, nos ayudaron a conseguir una reunión en Wharton, que se convirtió en nuestra segunda escuela.

Hoy, estamos apoyando a nuestros más de 80 socios en todo el mundo a desarrollar cursos y expandirse a nuevas áreas. La clave es generar confianza y mostrar a tus socios que los valoras profundamente. Nunca olvides que tus socios son la clave de tu éxito.

Lección 5: Rodéate de un equipo A+.

Mi cofundador, Chaitanya, ha sido el socio perfecto en este viaje. Tenía experiencia en educación; también en startups. Nos complementamos en forma importante. Y nos queremos y respetamos como personas.

Todo esto también se traslada al resto del equipo. Una de las cosas más importantes que he aprendido como CEO es el valor de rodearse siempre de personas inteligentes, estratégicas y creativas. Personas que te desafían a pensar de manera diferente y a dar lo mejor de sí mismos todos los días. Nuestro equipo me inspira y me desafía, y aprendo constantemente de ellos.

Seguimos estas lecciones para continuar con éxito. Y quizás lo más importante será, alentar a nuestro equipo a arriesgarse, porque sabemos que nuestros errores a menudo pueden ser los mejores aprendizajes. El fracaso es tan importante como el éxito.

 

Estoy orgulloso de liderar Emeritus con un equipo de 1,000+ miembros en todo el mundo que conforman a Emeritus (Singapur, Mumbai, Boston, Ciudad de México, Shanghai, Dubai, San Francisco, Nueva York). Todos ellos persiguen nuestra misión. Colaboramos con universidades de renombre para enseñar las “habilidades del futuro” a personas y organizaciones que buscan transformarse a sí mismas. Desde nuestra fundación en 2010, he encabezado nuestra estrategia comercial y de expansión.