CIBERSEGURIDAD Un tema que ningún negocio puede ignorar
La ciberseguridad no es un componente técnico del negocio, es un pilar esencial en la gestión de riesgos y, por ende, en la estrategia. Sólo basta pensar que sus datos y sistemas digitales no sólo impulsan su funcionamiento operativo, también constituyen un recurso valioso que hay que proteger.
De lo contrario, está en riesgo la integridad, la reputación y la rentabilidad de la organización. Ese riesgo se agudiza a medida que avanza la interconectividad, debido a la expansión de las tecnologías digitales.
Un tema que ningún negocio puede ignorar
Transacciones, almacenamiento de información sensible y una comunicación fluida y constante implican una creciente exposición a riesgos y amenazas. En este ambiente, los delincuentes cibernéticos -cada vez más sofisticados- emplean técnicas avanzadas para explotar vulnerabilidades y acceder a información confidencial.
Defender los “activos digitales” constituye entonces una prioridad que exige la gestión de profesionales que entiendan y sepan cómo atacar el problema. Esta nueva función -que avanza en importancia en el organigrama empresarial- no se reduce a tejer una red de protección contra hackers. Implica mucho más que eso.
Exige implementar estrategias y herramientas que protejan y pongan a salvo a la información, blindándola contra accesos no autorizados, robos de identidad y manipulación de datos.
Invertir en ciberseguridad no es una opción
Según el estudio “2023 Global Directors’ & Officers’ Liability Survey Report”, en 2023 los riesgos cibernéticos se colocaron -en términos de porcentaje- significativamente por sobre otros como: los riesgos regulatorios, de salud y seguridad en el trabajo, la legislación anticorrupción, demandas y reclamaciones en el trabajo o el riesgo de demandas en otros países. (2023 Global Directors’ & Officers’ – Liability Survey Report, WTW in collaboration with Clyde & Co LLP.)
En Latinoamérica, concretamente, directores y administradores destacan tres riesgos clave: La pérdida de datos, los ciberataques y el cibercrimen.
El estudio destaca la importancia que tiene definir, estructurar e invertir en planes comprehensivos para enfrentar riesgos cibernéticos. También señala la importancia de enfocar la gobernanza de esos riesgos y el pleno entendimiento de los compromisos que implica para el nivel directivo.
Así, el asunto de la ciberseguridad se convierte en un tema clave. No sólo para estructurar el plan de gestión de riesgos, sino también para perfeccionar las habilidades de quienes han de enfrentar las crisis que puedan presentarse.
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Estrategias de protección
Para hacerlo bien, el negocio exige poner sobre la mesa una combinación de tecnología, capacitación y políticas de seguridad que empiezan por:
- Capacitación continua.
- Realización de copias de seguridad periódicas.
- Actualizaciones de sistemas.
- Monitoreo y análisis constante de actividad.
- Autenticación multifactor (MFA): Este proceso dificulta el acceso sin el consentimiento del usuario, reduciendo el riesgo de que un atacante acceda a una cuenta con solo robar la contraseña.
Quienes se desarrollan en este nuevo universo o necesitan saber cómo proteger activos digitales y datos sensibles deben desarrollar habilidades técnicas avanzadas, de análisis y comunicación. También necesitan:
- Adquirir conocimientos técnicos en seguridad informática.
- Entender en profundidad las amenazas y vectores de ataque.
- Dominar regulaciones, normas y estándares de seguridad.
- Desarrollar su capacidad para el análisis de datos y sus habilidades de investigación.
- Aprender las claves para la gestión rápida.
- Entender la ciberseguridad como una estrategia integral que involucra a toda la organización.
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